La única posibilidad. (Mensaje de María del Rosario de San Nicolás)
4-7-86 .911
Yo les digo a mis hijos: En la humildad se conoce a Dios, desead perdón y hallaréis su misericordia; salid del pecado y Dios entrará en vosotros.
Pido conversión, porque sin ella, perdida estará la humanidad.
Amén, amén.
Leed: Romanos C.9, V. 14 al 18
14 ¿Diremos por eso que Dios es injusto? ¡De ninguna manera!
15 Porque El dijo a Moisés: "Seré misericordioso con el que Yo quiera, y me compadeceré del que quiera compadecerme".
16 En consecuencia, todo depende no del querer o del esfuerzo del hombre, sino de la misericordia de Dios.
17 Porque la Escritura dice al Faraón: "Precisamente para eso te he exaltado, para que en ti se manifieste mi poder y para que mi Nombre sea celebrado en toda la tierra.
18 De manera que Dios tiene misericordia del que El quiere y endurece al que El quiere.
Comentario:
Son palabras muy duras de la Virgen, que nos dicen que si la humanidad no se convierte, si no acepta el mensaje de salvación que María trae al mundo y cambia de vida, entonces estará totalmente perdida.
Es muy serio este mensaje, y si bien no nos debe asustar, sí nos debe dar fuerzas y empuje para hacer apostolado, invitando a todos los hombres a la urgente conversión, porque estamos en el tiempo propicio para la conversión, y este tiempo se puede terminar en cualquier momento.
Y no creamos que nosotros no necesitamos también conversión, pues todos somos más o menos pecadores, y todos tenemos que acercarnos más a Dios.
Recemos, especialmente el Santo Rosario, por la conversión del mundo, ya que sólo la vuelta del mundo a Dios es lo que podrá detener el curso de los graves acontecimientos que le esperan.
Esto no debe darnos miedo y abandonarnos al pesimismo, sino todo lo contrario, iniciar un gran movimiento de evangelización, aprovechando los medios modernos de comunicación de que disponemos y, sobre todo, ofreciendo nuestras oraciones y sufrimientos, sacrificios y penitencias por este fin, porque la salvación del mundo depende de la respuesta de la humanidad a este llamado del Cielo